¿No te pasa que a veces te la pasas dando órdenes y hablando rápidito sin poder tener una conversa a pierna suelta en español con tu hijo o hija?¿No te pasa que los apuros navideños nos impiden poder disfrutar de un tiempo con ellos? A veces resulta que hablar español con nuestros hijos bilingües no resulta tarea fácil.
Mis hijos tienen 5 y 3. Es una edad en la que las mamis y los papis andamos bien bien ocupados pues los chicos necesitan mucho nuestra presencia pero al mismo tiempo tenemos muchas cosas que solucionar en el hogar.
Apuros de mamá e hijos enfermos
Esta semana han estado los chicos enfermos en casa y hemos tenido que hacer un alto sí o sí.
Luego de unos días de enfermedad entramos a esa etapa que todos conocemos: están fuertes como para jugar y débiles para poder ir al cole o al nido ;(
Esta vez me he tomado este momento de enfermedad para hacer un alto y parar. Volver a reencontrarme con los niños. Es en estos momentos de enfermedad cuando se sienten mejor donde aprovecho para intensificar la exposición que tienen a la lengua ya que estamos juntos casi 24 horas. ¡Sobre todo ahora en las vacaciones!
Momentos dedicados a la lengua
Crea momentos especiales, momentos donde converses en nuestra lengua de manera intensiva
Si sientes que a tu hijo le falta las palabras y su nivel de español está disminuyendo te invito a que crees estos momentos especiales. La falta de nivel es una señal de que debemos intensificar los momentos de exposición a nuestra lengua.
El punto de partida aquí es que te des cuenta que eres tú la fuente de la lengua de tu hijo blingüe. Eres tú la que debe tomar conciencia de que debes crear estos momentos y darles un espacio en la agenda familiar. Tú eres su maestro y él o ella aprenderá de ti también aspectos relacionados al lenguaje.
Si bien es cierto les hablo a mis hijos de manera “normal” como si hablara contigo. Siempre uso algunos trucos para que a ellos les sea más fácil aprender nuestra lengua.
En este post te cuento sobre el arte de describir y permitir que nuestros hijos aumenten el vocabulario.
Si bien es cierto hacemos normalmente cosas juntos. Me doy cuenta que en ese espacio nos conectamos, usamos el idioma con mayor fluidez y vamos enriqueciendo nuestra relación en español.
Reír, jugar, conversar y volver a reír en tu lengua con tu hijo
Aspectos positivos de los momentos en español
Teniendo momentos especiales con ellos me di cuenta de muchos aspectos positivos en relación al aprendizaje de la lengua y el conocimiento de nuestras raíces.
Por ejemplo:
- Escuchar el deseo de mis hijios de querer ir a mi país.Ellos dicen que porque no nos meternos en un sobre para ir a Perú 😉
- Haciendo las tarjetas salieron temas interesantes como ¿para quién hacemos la tarjeta? ¿A quién se la mandamos?¿Quién era ese tío? ¿Cómo se llamaba?
- Conversamos sobre como se celebra las fiestas navideñas en Perú y que nos gustó y que no haríamos otra vez o que no comeriamos.
- Llamamos a mis familiares mucho más seguido para poder hablar con ellos y con la intención que los chicos cuenten lo que están haciendo.
- Repasar el vocabulario en relación a la actividad que estén realizando. Recordar juntos el nombre de las cosas.Ojo no preguntar tipo exámen sino hacerlo de manera amena sin causar presión. Por ejemplo puedes dar dos opciones de respuesta si no recuerdan el nombre. ¿Se llama lápiz o papel?
- Puedes corregir o mejorar las palabras y expresiones que tu hijo no está usando correctamente.
Toda esta situación fue uno de los momentos donde me di cuenta que hablar en español con nuestros hijos bilingües implica que nosotros los integremos en nuestra vida familiar y hagamos de ella un estilo dentro de nuestra familia.
Conversando, conectando y disfrutando de nuestros momentos especiales donde podemos transmitir raíces
Me encantó tu artículo, superlindo! Gracias por compartir!
Gracias por el comentario hermanita, lindo saber que te gustó 😉
Hace tiempo que quería leerte con tranquilidad y por fin hoy lo he logrado (en el auto, mientras mi marido conduce xD ).
Me ha encantado de verdad, no había pensado en eso y aunque mi hija tiene tres años, maneja bien ambos idiomas (español y alemán), pero como que a veces se le olvidan algunas palabras que se supone que ya sabía. Entonces voy a “ponerme las pilas” para tener momentos especiales con ella en español. 😉
Orly ha sido una alegría leerte! La verdad se me pasó contestarte y me gustaría hacerlo ahora. Gracias por tus palabras, me animan a sguir escribiendo. Te mando mucha buena vibra e inspiración para esos momentos especiales. Se genera un lazo muy lindo, así que ánimo!